En septiembre de 2021, el gobierno coreano se enfrentaba a una gran crisis. Un grupo de peligrosos delincuentes había sido capturado en Manila y ahora debía ser trasladado a Busán para ser juzgados. Pero estos criminales eran conocidos por ser muy peligrosos y astutos, por lo que el gobierno decidió enviar a los mejores detectives del país para asegurarse de que no escaparan durante el viaje.
El buque de carga se llamaba «El Pacificador» y estaba listo para partir hacia Busán. A bordo se encontraban los 22 detectives más experimentados de Corea, liderados por el capitán de la policía Suk-woo. Cada uno de ellos tenía al menos 10 años de experiencia investigando crímenes violentos, y estaban decididos a asegurarse de que estos peligrosos criminales fueran juzgados por sus crímenes.
Sin embargo, el viaje no fue nada sencillo. Desde el primer momento, los detectives notaron que algo andaba mal. El buque parecía estar en mal estado, y los sistemas de seguridad parecían haber sido manipulados. Además, algunos de los reclusos parecían estar más alerta de lo que deberían estar, y el equipo empezó a temer que hubiera alguien en el barco que estuviera trabajando para los criminales.
A medida que avanzaba el viaje, los detectives se dieron cuenta de que algo mucho más terrorífico estaba sucediendo. Parecía haber alguien en el barco que estaba tratando de matarlos a todos. Las luces se apagaban, los motores fallaban y los sistemas de seguridad se desactivaban. Los detectives tuvieron que unir sus fuerzas para descubrir quién estaba detrás de todo esto y detenerlo antes de que fuera demasiado tarde.
Después de varios días de tensión y misterio, los detectives finalmente descubrieron la verdad. Uno de los reclusos, un hombre llamado Min-ho, era en realidad un peligroso criminal que había huido de Corea y había estado trabajando con los delincuentes capturados en Manila. Min-ho había estado tratando de escapar durante todo el viaje, y había estado tratando de matar a los detectives para asegurarse de que no lo detuvieran.
En una épica lucha final, los detectives lograron detener a Min-ho y llevarlo ante la justicia. El buque llegó a Busán con los criminales en custodia y los detectives siendo aclamados